El 'vamos-por-un-café' se ha convertido en una de las tendencias de más rápido crecimiento en Pakistán audaz y hermosa. Los barrios de más prestigio y ricos en Karachi y Lahore están llenas de cafés donde jóvenes y adultos procedentes de entornos acomodados vienen a probar el sabor de una variedad de bebidas de café.En términos de preferencias asombra que el café esté reemplazando al tradicional "chai", locura a la que nuestra sociedad es adicta.

 

 

Curiosamente, el café no es un fenómeno único en el Este; las primeras plantas de café crecieron en la Península Arábiga, y la bebida se introdujo hacia el Oeste por los turcos otomanos.

 

Las cafeterías proporcionan un ambiente relajado donde los jóvenes y los no-tan-jóvenes están girando sus tazas calientes de café. La comida que se sirve aquí es ligera, junto con menús que albergan una colección de deliciosos postres.

 

En cuanto al café concierne, los rangos de elección del Cappuccino, steaming black Espresso (solo para 'serios' bebedores-de-café) con suaves combinaciones de sabor caliente y frío. Un gran favorito es el Mocha, una combinación divina de chocolate-café que es rico y delicioso para el paladar.

 

 

Quizás lo mejor de 'ir por un café' es que las cafeterías están abiertas en cualquier momento desde temprano en las mañanas hasta tarde en las noches. Las personas que los frecuentan on en general diversas, estudiantes, asistentes de oficina, intelectuales, artistas y begums. No es inusual caminar dentro de una cafetería y en ver mesas a ejecutivos en su descanso, parejas o grupos de jóvenes para un bocadillo o socializar. La atmósfera es informal, ruidosa y acompañada de música popular. Una vez que estás en el café no tienes prisa de irte; el café y la charla están al-orden-del-día en un ambiente tan frío.

 

 

Las principales razones de la mayoría de las personas que frecuentan las cafeterías es escapar de la rutina, reunirse con amigos o leer un libro, acompañado de un capuchino humeante o un Frappuccino frío. Es una agradable-informal manera de pasar una tarde casual, a diferencia de las comidas formales y comidas de tres platos la idea es hacer algo espontáneo y divertido.  En definitiva 'ir por un café' parece ser algo más que una moda pasajera; la 'cultura del café' es una declaración de los nuevos tiempos, valores y prioridades, y parece haber llegado para quedarse.