MI EXPERIENCIA EN MANO AMIGA
En los diez años de mi vida que llevo estudiando en Mano Amiga, he disfrutado mucho de varias experiencias que nos han ofrecido vivirlas.
Cuando ingrese a esta institución que fue en tercero de kínder, recuerdo que me sentí un poco rara, ya que era nueva y no conocía a nadie. Sin embargo me gusto el ambiente, me sentí cómoda y segura.
Recuerdo que se me hacía algo extraño el que a cada rato tuviésemos que hacer oración. Ahora me doy cuenta de lo que realmente significa y que en todos momentos debemos dar gracias a Dios.
Mano Amiga no solo es un colegio católico como muchos dicen, sino es un lugar donde nos enseñan a trabajar los valores que nuestros padres nos han inculcado desde pequeños.
Otro motivo por el cual es un buen colegio es que aquí los profesores no solo son profesores, sino que son personas que nos brindan su confianza y apoyo en todo momento.
Gracias a mis padres es porque estoy en esta grandiosa institución, pero sobre todo gracias a Dios, porque él fue quien los guío hasta aquí.