Termina un mes en el TEC y creo que tengo muchas cosas que compartir, más de las que esperaba.
Cuando entré me era difícil todo, pero poco a poco he aprendido a disfrutar de cada día, a extrañar un poco menos a la gente que solía ver a diario y a no pasar tanto tiempo con mi mamá como antes, aprendí a hacer nuevos amigos, a comunicarme con mis nuevos maestros, aprendí lo que nunca en mi vida había tenido la necesidad de memorizar, mi matrícula.
Aprendí a decir todo por sus iniciales o siglas (DAE, CEDETEC, LP, CIIE, MC, LCDE, ITC, IDS…), aprendí que todos los días debía llevar el celular con la batería llena y a depender de él más de lo que solía, aprendí a tener más de cinco grupos de watts app y a abrir constantemente para no tener más de 50 mensajes sin leer, aprendí la importancia de llevar una agenda de actividades, tareas, exámenes… a abrir diario blackboard y el correo institucional, además de nunca olvidar la credencial.
Aprendí que formo parte de una gran familia, en otras palabras aprendí a ser parte del TEC.